En un día de euforia desestabilizadora, después del despido de Angel Cappa circularon insistentes rumores sobre la renuncia de Claudio Borghi a su cargo en Boca, como para que el superclásico del martes pudiera tener una cuota doble de originalidad. Borghi desmintió que fuera a renunciar, pero dijo no saber si será el técnico del equipo la semana próxima. “No tengo idea si voy a ser el técnico ante River. En una semana pasan muchas cosas y el ejemplo más claro es lo que le pasó a Angel (Cappa). Sin olvidarme de lo que ocurrió con Bielsa, que de un día para el otro se cayó un gran proyecto”, afirmó. Borghi admitió que no tiene “el consenso general” en Boca. “Nadie se mantiene en el cargo sin ganar. Un entrenador debe hacerse cargo del pasado, el presente y el futuro del club. Hoy se habla más de los que perdemos que de los punteros mismos, algo que a veces suena ridículo”, subrayó. “Nunca pensé en enfrentar a un River sin Cappa –agregó–. Angel es un tipo que le ha hecho muy bien al fútbol argentino, y es una forma poco ortodoxa en la que dejó el cargo. Me entristece mucho su ida.” Borghi calificó de “locura” lo sucedido con su colega. “Ya es el sexto entrenador que se queda sin trabajo durante este torneo. No tenemos posibilidades de hablar ni con los dirigentes ni con los periodistas sobre fútbol. El dirigente no tiene que saber de fútbol necesariamente. Este sistema y esta vorágine ya no dan para más, ningún proyecto se sustenta.”