“Por supuesto que cae bien.” La frase que pronunció anoche ante Página/12 un diputado del Frente para la Victoria reflejaba la reacción generalizada que despertó entre los legisladores oficialistas la invitación de la Presidenta a compartir un almuerzo en la quinta de Olivos. Será mañana al mediodía. En la lista de invitados figuran no sólo los diputados y senadores del FpV, sino también los legisladores de bloques aliados, como el Movimiento Popular Neuquino, la Concertación y el Frente Cívico santiagueño. Pero la convocatoria no busca sólo aceitar la relación de las bancadas oficialistas con el Ejecutivo, una demanda que se repetía como un mantra hace dos años: el objetivo central es informar en detalle cómo se distribuyen los fondos del presupuesto entre las 23 provincias. El trasfondo de este informe, que promete ser meticuloso y estará a cargo de varios miembros del gabinete de perfil económico y político, es la exhortación oficial a los gobernadores a que se manejen con responsabilidad ante una eventual reforma de la ley del impuesto al cheque.

Por el Gobierno, además de Cristina Kirchner, estarán presentes la mayoría de los ministros y varios funcionarios de jerarquía. También se descuenta que asistirá el diputado y ex presidente Néstor Kirchner, en su doble condición de miembro del bloque oficialista en la Cámara baja y esposo de la jefa de Estado. Uno de los anfitriones en nombre del Ejecutivo será por supuesto el ministro del Interior, Florencio Randazzo. Como responsable de esa cartera, Randazzo es quien tiene a su cargo la distribución de los famosos Aportes del Tesoro Nacional (ATN). De su ministerio depende además la Secretaría de Provincias, en la que recientemente fue nombrado el ex diputado Luis Ilarregui.

Ayer, Randazzo salió a hacer declaraciones para ir preparando el clima con vistas al almuerzo en Olivos. “Hay un presupuesto sancionado y gastos e inversiones para el año 2010. Nos parece una barbaridad que algunos quieran sacarle estos recursos al gobierno nacional, recursos que están destinados en definitiva a las provincias”, dijo. En el almuerzo, que probablemente será el clásico asado a cargo de los parrilleros de la quinta, también se analizará otro tema sensible y que tiene garantizado un espacio importante en la agenda de este año: la discusión de un nuevo reparto de los fondos coparticipables.

El propio Kirchner asumió como propio el debate sobre la necesidad de hacer cambios en la coparticipación. Lo dijo el miércoles 10 de marzo en Resistencia, capital del Chaco. Allí prometió que este año se creará una comisión del máximo nivel con el objeto de comenzar a debatir un nuevo reparto de los impuestos coparticipables. Uno de los puntos controvertidos del debate es la intención de la provincia de Buenos Aires de recuperar los seis puntos porcentuales que perdió en los años ’80, cuando el entonces gobernador radical Alejandro Armendariz cedió esos puntos en una compleja negociación aprobada por el presidente Raúl Alfonsín.

La lista de invitados para el asado en Olivos incluye a los diputados y senadores del Frente para la Victoria-PJ, pero también a los legisladores de espacios aliados como Hugo Prieto (MPN neuquino), Héctor Alvaro (Concertación, Mendoza) y Norma Abdala, Daniel Brue, José Herrera, Ana Luna, Cristian Oliva, Mirta Pastoriza y Jorge Pérez (todos del Frente Cívico por Santiago del Estero que encabeza el gobernador Gerardo Zamora). Según adelantaron a Página/12 desde el Ministerio del Interior, en el almuerzo se hará un informe preciso sobre la actualidad de la distribución presupuestaria entre las provincias: “Vamos a contar cuál es la situación de cada una de las provincias, cuánto se invierte en obras, lo que recibe cada provincia en concepto de coparticipación”.

Se descuenta que la Presidenta hará una defensa enfática de su gestión, sobre todo de las decisiones más importantes, como la idea de usar reservas del Banco Central para cancelar vencimientos de deuda con organismos multilaterales y tenedores privados de bonos argentinos. Tanto la jefa de Estado como los jefes de los bloques en ambas cámaras aprovecharán también para hacer un análisis de la agenda parlamentaria.

El escenario parece haber cambiado tras el fallo del juez Enrique Lavié Pico que ordenó a la oposición dar marcha atrás con el cambio en la composición de la Comisión Bicameral de seguimiento de los DNU. Tras ese fallo del fuero Contencioso Administrativo, el oficialismo estaría dispuesto a aceptar que la comisión de revisión de los DNU sea presidida por un opositor. Pero el acuerdo tendría sus condiciones. El FpV pretende sumar un senador más –de seis a siete– en tres comisiones del Senado: Presupuesto y Hacienda, Acuerdos y Asuntos Constitucionales. Las tres comisiones son claves para el ejercicio del gobierno.