EL PAíS › LA ESTRATEGIA PARA “EMPLEAR” A MENORES DE EDAD

Con los cabecillas como tutores

 Por Emilio Ruchansky

La presencia de menores de edad en los campos allanados no es casual. Algunos de ellos le contaron al personal de la Oficina de Rescate de los Damnificados por el Delito de Trata que habían pedido prestados documentos a familiares y amigos mayores de edad para “trabajar”. Sin embargo, no eran la mayoría. Según pudo constatar esta Oficina, casi todos los menores tenían autorización de sus padres para irse de Santiago del Estero. El tutor bien podría ser el “cabecilla” de la cuadrilla, aunque a veces ni siquiera aparecía mencionado un tutor.

“En algunos casos se especificaba que el traslado debía ser a una provincia en particular diferente del lugar donde fueron encontrados (por ejemplo a Córdoba y se los encontró ‘trabajando’ en San Pedro). En general los sellos de las autorizaciones eran ilegibles. Las autorizaciones especiales de algunos de los menores de edad se hicieron en el Juzgado de Paz de la ciudad de Sumampa, Departamento de Quebrachos, provincia de Santiago del Estero, en el cual no se citaba a ningún adulto como su tutor responsable”, dice el informe.

Estas autorizaciones insistían en que el menor debía realizar “tareas rurales, acorde con su edad y estado físico”. No fue lo que ocurrió. Hacían las mismas tareas que los demás y en las mismas condiciones infrahumanas. “Cabe mencionar que uno de los hombres entrevistados relató que el día anterior al allanamiento la empresa se había encargado de trasladar fuera de la finca allanada a un adolescente de 14 años, que había sido golpeado por el capataz en reiteradas oportunidades”, dice el informe sobre la finca Santa Celestina. También uno de los ingenieros de la multinacional Satus Ager le pidió los documentos de un menor a su padre, que había ido a “trabajar” con él. Lo hizo dos horas antes de un allanamiento.

Mientras avanzaban en las entrevistas, varios jóvenes peones, la mayoría de 18 o 19 años, contaron que hacía tres o cuatro años que desfloraban maíz llevados desde Santiago del Estero a Buenos Aires por Adecco, la contratista de empleados temporarios.

Compartir: 

Twitter

SUBNOTAS
  • Con los cabecillas como tutores
    Por Emilio Ruchansky
 
EL PAíS
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.