En el Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT) están decididos a ir por el premio mayor: “Alcanzar un bloque de diputados en el Congreso y en varias Legislaturas del país, e incluso concejales en algunos distritos”, dicen los dirigentes de esta alianza de partidos trotskistas. Lo ven como “una posibilidad cierta a partir del millón de votos” obtenidos a nivel nacional por la izquierda en las PASO. En tren de mostrarse como una opción útil aventuran con optimismo que podrán obtener “dos diputados nacionales por la provincia de Buenos Aires, uno por la Ciudad de Buenos Aires, y uno por Mendoza, Córdoba y Salta”. Los ejes de la campaña serán la abolición del impuesto al salario, el 82 por ciento móvil y la dirección del Anses por parte de jubilados y trabajadores electos, el fin de la precarización laboral y la denuncia del compromiso común del oficialismo y la oposición con el pago de la deuda externa, según detallan, expresado en la votación a favor de la reapertura del canje con los fondos buitre. También pondrán énfasis en que “el Gobierno adoptó la agenda de la derecha por la entrega a Chevron, la mano dura con la designación de Granados y la propuesta de la baja de la edad de imputabilidad”, con la idea de capturar al “electorado popular que votaba al Gobierno y otras variantes de centroizquierda y así demostrar que la decadencia del kirchnerismo no sólo tiene salidas por derecha”.