La fiscal de instrucción 6 de Pergamino, Patricia Fernández, mandó a analizar las computadoras y la documentación secuestrada en las oficinas de la Jefatura Departamental de esa ciudad, donde se cree que era el centro de operaciones de la organización, según informó la agencia Télam.

La fiscal Fernández indagó en las últimas horas al oficial Carlos Ortega, el único detenido en el marco de la causa -los otros tres oficiales están prófugos- , pero se negó a declarar, tras lo cual seguirá detenido. Según se supo, Ortega era un eslabón más en la cadena de la asociación ilícita en la que está acusado, y si bien en los papeles prestaba servicios en la comisaría segunda de Pergamino, su desempeño concreto estaba en la Jefatura Departamental, junto al ex jefe el comisario mayor Miguel Pocovi, uno de los prófugos.

Pocovi está sindicado como jefe de la organización delictiva y fue desplazado de su cargo por Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad bonaerense en febrero pasado. Por el hecho también están involucrados el ex jefe de calle de esa dependencia Javier López, el subcomisario Guillermo Gómez y el oficial principal Mario Guareschi.

Entre esos comerciantes que los acusados habrían extorsionado figuraban dueños de prostíbulos de ciudades cercanas a Pergamino, a los que les exigían hasta mil pesos por noche para permitirles abrir las puertas, dijeron las fuentes judiciales a la agencia oficial.

Además, "no sólo fraguaban los comprobantes (de compra de combustibles para patrulleros), lo que podría derivar en otro delito como 'malversación de caudales públicos', sino también cargaban combustibles a sus vehículos particulares", explicó un investigador.