El DT despedido se mostró incluso comprensivo sobre las dificultades para obtener las nuevas incorporaciones que había reclamado "como requisito necesario para poder lograr campeonatos con resultados óptimos".

"Si hay imposibilidad en la compra de jugadores, por falta de presupuesto, siempre existirá la posibilidad de discutirlo en conjunto con el consejo y buscar soluciones", señaló.

Además, insistió en que "siempre fue mi deseo permanecer en esa tierra maravillosa que tan bien me ha recibido" y expresó su agradecimiento "al jeque por haberme recibido y darme la oportunidad de dirigir un equipo de los Emiratos Arabes".

Mohammed ben Fahd, presidente del Al Wasl, afirmó por su parte que "el cambio forma parte de la vida" y que la marcha del técnico argentino se pactó amistosamente.

Diego firmó con el Al Wasl en junio de 2011, once meses después de ser destituido como seleccionador de Argentina.