SOCIEDAD › EN EL JUICIO CONTRA CINCO POLICIAS POR HOMICIDIO

Curiosa desaparición de pruebas

A un mes de que comience el juicio por la muerte de la joven Andrea Viera, ocurrida en 2002 en una comisaría de Florencio Varela, presuntamente a manos de la policía, el fiscal de la causa, José María Gutiérrez, denunció ayer la desaparición de una prueba clave para el juicio que se hará contra cinco efectivos de la Policía Bonaerense, por la aplicación de tormentos a la joven y su posterior fallecimiento.

“Hasta ahora están perdidos los videos y fotos digitales de la autopsia hecha a la víctima y por eso he pedido a la Asesoría Pericial que haga una exhaustiva búsqueda”, dijo el titular de la Fiscalía de Juicio 3 del Departamento Judicial de Quilmes.

Los videos y fotos estaban en manos del médico forense Raúl Gustavo Alonso, pero al ser requeridos por el fiscal Gutiérrez para ser exhibidos como pruebas durante el juicio oral y público que comenzará el 12 de junio, el profesional dijo que no los tenía ni sabía dónde están.

“Nos resulta muy sugestivo que un mes antes del juicio desaparezcan pruebas y más porque el doctor Alonso había dicho, cuando declaró como testigo, que tenía las imágenes guardadas bajo siete llaves”, advirtió el abogado querellante, Luis Valenga.

“Por suerte, las conclusiones de la autopsia hecha por los peritos forenses están escritas y son muy elocuentes al responsabilizar a los policías por el estrangulamiento de Andrea”, concluyó.

En la causa serán sometidos a juicio oral una mujer policía y cuatro camaradas suyos de la Policía Bonaerense. La principal acusada es la cabo primero Marta Jorgelina Oviedo; también están procesados el oficial principal David Leonardo Gutiérrez, el oficial subinspector Diego Hernán Herrera, el suboficial principal Carlos Daniel Maidana y el agente Oscar Luciano Farías.

Oviedo cuenta con prisión domiciliaria con pulsera electrónica de monitoreo porque adujo padecer problemas cardíacos, mientras que de los cuatro policías sólo dos cumplen prisión preventiva.

Todo comenzó el 10 de mayo de 2002, cuando Andrea y su pareja, Gustavo Cardozo, esperaban un colectivo en el centro de Varela, donde se desató un tiroteo en el que un policía terminó herido y un delincuente murió. Inmediatamente después fueron detenidos por los uniformados para averiguación de antecedentes y conducidos a la comisaría primera.

Según el testimonio de Cardozo, Oviedo golpeó fuertemente en la cabeza a Viera para obligarla a ascender al patrullero y luego prosiguió con los tormentos, hasta que una vez que llegaron a la comisaría los separaron y su compañero no la vio más. Ninguno tenía antecedentes ni armas.

Luego, Viera fue trasladada al hospital Mi Pueblo, de Florencio Varela, donde ingresó en estado de coma a la sala de terapia intensiva, donde finalmente falleció después de una agonía de once días.

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