Veinticuatro fueron los disparos de arma nueve milímetros que impactaron en los cuerpos de las víctimas del triple crimen de Granadero Baigorria, que anteayer sacudió la tarde de Liniers al 2000. El fiscal Florentino Malaponte sumó ayer que los tres asesinados ‑Ezequiel "Parásito" Fernández, su hermano José y Ariel "el abuelo" Abregú‑ tenían antecedentes; incluso, Parásito se fugó tras una condena a 10 años de prisión por un homicidio de 2012. Las partes no descartan ninguna hipótesis sobre el móvil del hecho y el tema del narcotráfico sobrevuela la investigación sobre la que aún no se habla de hipótesis o líneas concretas, sino de establecer la mecánica del hecho y quiénes fueron los autores. Para el fiscal "es razonable" pensar en esa problemática como línea de investigación, pero fue cauto. Para el abogado de los hermanos Fernández, Ariel González Zeballos, "existía una clara intención de que nadie saliera con vida de ese auto", pero no aventuró de dónde podía venir el ataque, pese a que sus clientes estuvieron relacionados a Ariel "Guille" Cantero en un secuestro del año pasado.

"Lo que tenemos hasta el momento es que no fue un enfrentamiento, no hay señales de defensa de las víctimas: reforzamos la versión de que estaban estacionando en el lugar y los agresores los estaban esperando. Fue algo evidentemente organizado, y al menos dos fueron los que dispararon. No haré conclusiones ahora, sino que se trabaja en la mecánica del hecho en el lugar. Se encontraron 28 vainas calibre 9 milímetros". Sobre las cámaras de seguridad, el fiscal indicó que se buscan algunas privadas y públicas, aunque éstas últimas no son cercanas.

"Las tres personas tienen antecedentes", agregó el fiscal, quien consultado sobre las hipótesis relacionadas al narcotráfico, se limitó a decir que se trata de una conjetura "razonable", pero prefirió no adelantar más que los datos objetivos.

Para el abogado de los Fernández, en tanto, la "hipótesis puede ser cualquiera". Y agregó: "No puedo aventurar una línea porque sería irresponsable. Podríamos hablar de una emboscada, de un pase de factura o una devolución. Las hipótesis pueden ser muchas", sostuvo. "Sí había, por la cantidad de disparos que se hicieron, una clara intención de matar", señaló.

El abogado representó a los hermanos Fernández en una causa por secuestro que estuvo digitada por Guille Cantero, quien al advertir que el secuestrado no era el que correspondía, terminó pidiendo dos kilos de carne como rescate, ya que el padre del joven era carnicero.

Sobre los antecedentes, José Fernández y Abregú estaban involucrados en un asalto al Banco Francés, en octubre de 2014. Abregú también estuvo acusado del atentado en el que fue acribillada a balazos una pareja de adolescentes en barrio Santa Lucía, el 21 de mayo de 2015, pero fue desvinculado.