La policía de Varsovia detuvo a más de cien hinchas, entre polacos y rusos, por disturbios antes y durante el partido que Polonia y Rusia igualaron 1-1 por el Grupo A de la Eurocopa, el choque considerado más políticamente caliente de la primera fase. Los incidentes dejaron varios heridos. En el otro partido disputado ayer, la República Checa venció 2-1 a Grecia y quedó segunda en el grupo, con tres puntos, detrás de Rusia (4 puntos) y delante de Polonia (2) y Grecia (1). Hoy, por el Grupo B, jugarán Portugal-Dinamarca y Alemania-Holanda. Por otra parte, el delantero italiano Antonio Cassano se vio forzado a disculparse públicamente por haber declarado que esperaba que no hubiera “homosexuales en la selección; si los hay, es problema de ellos”. En un comunicado de la Federación Italiana de Fútbol (FIGC) afirmó: “No quise ofender a nadie y de ninguna manera abrir un debate sobre la libertad sexual de las personas. La homofobia es un sentimiento que no está en mí”.