Según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), los montos de las ventas en los supermercados registraron en marzo un incremento superior al 25 por ciento, mientras que en los shoppings la suba fue del 23,3 por ciento interanual. Sin embargo, al comparar el crecimiento con la evolución de precios constantes, en términos reales las ventas cayeron entre un 10 y un 8 por ciento. La Oficina de Estadística porteña proyectó una inflación interanual para marzo de alrededor del 35 por ciento.

El director ejecutivo de la Asociación de Supermercados Unidos (ASU), Juan Carlos Vasco Martínez, sostuvo que el el consumo cayó 8 por ciento en los supermercados durante marzo, pese a que se atenuó la suba en los precios de los alimentos respecto a meses previos.

Según el directivo, las mayores mermas se anotaron en los rubros de bienes durables, como la electrónica, línea blanca y textil. Esta caída en las ventas -en la medición por cantidad de productos- también fue reflejada por las principales consultoras especializadas en consumo.

En ese marco, el director comercial de la consultora Kantar Panel, Federico Filipponi, dijo a Télam que "las promociones no ayudaron a las primeras marcas que ahora están obligadas a reconsiderar su estrategia de precios".

El especialista también reflejó el crecimiento de las segundas marcas, impulsadas por la sensible diferencia que existen en los precios respecto a las primeras marcas, que en el caso de las gaseosas pueden ser de hasta un 40 por ciento.