La marca del saco no hace falta adivinarla para saber que es italiano. Lo combina con una camisa, jean y zapatillas. Como se encuentra alejado de las ligas principales, muchos lo consideran ya un ex jugador, pero Alessandro del Piero continúa participando desde hace dos años en el Sydney Fútbol Club de Australia. Campeón del Mundo en Alemania 2006 con la Selección de Italia, se encuentra en Brasil contratado por una cadena televisiva para comentar el juego que se está desarrollando aquí. El futbolista que alcanzó su consagración en la Juventus de Turín se detuvo para dialogar con Página/12 sobre lo que ocurre en esta Copa.

–¿Lo sorprendió algo en particular del juego que están mostrando los equipos?

–Me gusta mucho el nivel de juego en general. Está siendo una linda Copa hasta aquí, y creo que va a seguir así hasta el final.

–Comparado con Sudáfrica 2010, ¿el nivel es mejor?

–Sí, creo que sí.

–¿Cuál de todas la figuras le gusta más?

–Las figuras son Messi y Neymar. Están demostrando que tienen un nivel muy bueno, y eso potencia más a sus equipos.

Cuando fue consultado sobre la situación que le tocó vivir a la selección de su país, Del Piero se puso serio y realizó un gesto de tristeza. “Fue una gran frustración lo que pasó con Italia. Me parece que era otro de los equipos que se esperaba que podían llegar lejos, pero es preocupante no pasar la primera ronda. Para colmo, en dos mundiales consecutivos.”

Del Piero sale corriendo acompañado por productores de la televisión italiana, para llegar a tiempo a cumplir su función junto a los periodistas, mientras recibe pedidos de fotos y autógrafos. El italiano se escapa de la misma manera que se escapó el 26 de noviembre de 1996, en el estadio Olímpico de Tokio, cuando eludió la marca para convertir el gol ante River, en la final de la Copa Intercontinental, cuando apenas quedaban nueve minutos para el final de ese partido. Con la misma elegancia se mueve Del Piero por Brasil, imaginando goles desde alguna platea.