Ante la chance que se le presentó de manera inesperada por la ausencia de Juan Martín del Potro, Carlos Berlocq asumió el desafío con entereza. “Cuando me informaron lo de Juan Martín, por un lado me sorprendió. La verdad es que ni el equipo ni yo nos esperábamos eso. Ahora hay que pensar en el partido y obviamente que si gano va a ser el partido de mi vida”, indicó el tenista de Chascomús, que reconoció que se siente presionado por el momento que le tocará para debutar como singlista en la Copa Davis. “El tenista es humano como cualquiera, siempre hay presiones, en este caso se puede decir que hay más presiones. Tengo 29 años y en mi vida pasé por diferentes presiones. Soy una persona que tiene siempre mucha fe y lo último que pierdo es la esperanza de poder derrotar a Berdych”, precisó el tenista, que cayó las dos veces que jugó ante el checo, en el Masters 1000 de Miami del año pasado y en la Copa del Mundo por equipos en Düsseldorf esta temporada. “Fueron partidos muy duros y ojalá que haga un partido de seis horas”, remarcó Berlocq, que tiene claro lo que tiene que hacer en la cancha: “Tengo que pensar en jugar mi mejor tenis, estar a más del ciento por ciento para ganar. No puedo especular con que él está cansado”.