La imagen de la modelo argentina Ximena Pichel gritándole “indio”, “negro” y “naco” (vulgar) a un agente de tránsito en la comuna Condesa, de la capital mexicana, se viralizó y provocó el repudio en las redes. La presidenta Claudia Sheinbaum calificó como “deplorable” la actitud de la mujer y mostró “toda nuestra solidaridad con el policía que recibió esos insultos”. Ayer, Pichel ensayó una reparación: “No soy una persona racista. Me gustaría ver al policía y pedirle de frente una disculpa. Aunque la gente ahora no me lo crea soy una buena persona, muy leal, me llevo con todo el mundo, con el señor que vende los tacos, con todos”. Prometió que empezaría terapia para frenar sus expresiones. Sin embargo, “Lady Racista”, como la bautizaron en las redes, empeoró con la divulgación de un nuevo video en el que acusa de “pinche gata (sirvienta) de mierda” a una agente de seguridad de su edificio.